Las Doorway Pages, también conocidas como páginas puerta, son una de esas técnicas que deberían haber quedado enterradas con el SEO de los años 2000.
Pero no.
Como zombies del pasado, aún se ven en algunos proyectos que creen que pueden engañar al algoritmo con trucos (demasiadas veces) mal ejecutados.
Una Doorway Page es una página que se crea única y exclusivamente para posicionar por una keyword o ubicación concreta, sin intención de aportar valor real. Su único propósito es redirigir al usuario a otra página, muchas veces con un contenido duplicado o irrelevante.
Imagina que creas páginas como “fontanero en Barcelona”, “fontanero en Madrid”, “fontanero en Sevilla”, todas con el mismo contenido, solo cambiando el nombre de la ciudad, y todas terminan enviando al usuario a una landing genérica o a la home. Eso es una Doorway Page.
Ahora bien.
No digo que sea una táctica irrelevante, ni una milonga. Es una táctica peligrosa, porque de hacerse, se puede hacer, pero hacerla mal es mucho más fácil que hacerlo bien. Como en todo en SEO, no es tanto lo que haces, sino cómo lo haces y con qué intención.
La diferencia entre una doorway page penalizable y una landing local bien trabajada es el valor que aporta. Así de simple (y así de complejo).
¿Cuándo sí tiene sentido una landing para cada localidad?
- Cuando realmente prestas el servicio en esa ciudad o barrio. No vale poner “Fontanero en Murcia” si no pisas Murcia ni por error.
- Cuando hay diferencias reales según la localización. Si cambian los precios, el tipo de servicio, el horario, el equipo que atiende, el tipo de cliente, etc. Entonces sí. Estás adaptando tu propuesta de valor a una realidad local.
- Cuando puedes personalizar el contenido de verdad. No sirve cambiar cuatro nombres de ciudad. Hablamos de adaptar ejemplos, testimonios, fotos del equipo local, problemas típicos del área, etc.
Diferencia entre doorway page y landing local
Cuando buscas “fisioterapia en barrio de Salamanca” y acabas en una página que es igualita a la de “fisioterapia en Chamberí”, “fisioterapia en Retiro” y en cualquier otro barrio de Madrid. Mismo texto, mismas fotos, mismos testimonios, solo cambia el nombre del barrio. Eso, como tu sentido común habrá detectado, es una Doorway Page: una trampa para Google y para el usuario.
Ahora bien, ¿quieres ver cómo se hace bien?
Podría decirte cualquier directorio tipo Topdoctors, demasiado fácil, porque el contenido en cada localidad es sustancialmente diferente. Pero vayamos a un ejemplo más concreto.
Ya que estamos en el sector salud, hay una clínica oftalmológica en Barcelona que lo clava. Y no porque tenga una página genérica para cada ciudad, sino porque incluso dentro de una misma ciudad como Barcelona, desarrolla landings distintas para cada centro.
Cada una con información específica: tratamientos que se ofrecen solo en ese centro, oftalmólogos que atienden en esa clínica concreta, fotos del lugar… contenido único, relevante y útil para el usuario.
Y eso para Google, no es una Doorway Page, es una landing local bien pensada y ejecutada. ¿Ves la diferencia? Una se hace para posicionar. La otra, para ayudar (y por eso, posiciona).